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domingo, 1 de enero de 2017

Lecciones contra el espionaje tecnológico, la guerra psicológica y la infiltración

ETA y la izquierda abertzale de antaño tienen poco o nada que ver con el nuevo independentismo catalán pero hay un problema: la mayoría de los agentes del CNI desplazados a Catalunya provienen del País Vasco y de la lucha contra ETA. Por muy diferente que sea el independentismo catalán de la izquierda abertzale vasca, ellos piensan en clave de ETA y tratarán por todos los medios de convertir a los independentistas catalanes en los nuevos etarras.

Es muy probable que la falsa carta atribuída a la ANC escrita en tono amenazante y dirigida a empresarios catalanes para exigirles sumas de dinero, haya sido elaborada por las cloacas del estado español. Por mucho que Felipe VI diga que haya que cerrar heridas, no remover el pasado además de otras tonterías en su discurso navideño, el estado español suele hacer todo lo contrario a lo que dice. Es su seña de identidad.

Un diario digital español saca pecho sobre la derrota policial de ETA, con datos que en muchos casos, yo ya conocía.

Virus informáticos: primero importados y de producción nacional, a través de ellos el CNI se hacia con el control de los teléfonos móviles de los etarras, les permitía hurgar en sus pantallas y escuchar sus conversaciones, además hacían de micrófonos.

Satélites: Durante la presidencia de Aznar, el colegueo con el paleto de George W. Bush fue a más, y parece ser que la NSA y la CIA facilitaron tecnología al estado español para usarla en su lucha contra ETA, tecnología como satélites que vigilaban el norte del estado español y el sur de de Francia pero con las pésimas relaciones de Zapatero con la administración estadounidense, esta colaboración se truncó y aún así ETA fue derrotada igual.

Vigilancia en Internet: Según este medio, un jefe  de ETA no fue localizado por agentes desplazados en el sur de Francia, sino desde el ordenador de la sede central en Madrid. Los espías siguieron el rastro de sus correos electrónicos hasta dar con su ordenador y su ubicación.

Guerra psicológica: Los espías se dedicaron a labores de intoxicación, desmoralización, división, excitación, generar enfrentamiento entre miembros de ETA y también usaron la colaboración internacional, real o no, para crear una sensación de omnipresencia entre los etarras y de que se sintiesen vigilados permanentemente, creado un estado lógico de paranoia. Ni que decir tiene, que parte de la tensión que ha habido entre PDECAT, ERC, La CUP, ANC, EN COMÚ PODEM, etc, ha sido generada por el estado español: Centro Nacional de Inteligencia, medios de comunicación afines al régimen, "diálogo y negociación trampa" del gobierno del PP, detenciones de independentistas a cargo de los Mossos d'Esquadra, división a la hora de seguir una estrategia común y dinámica.

Penetraciones de incógnito: Infiltración en domicilios haciéndose pasar por técnicos de empresas de telecomunicaciones para instalar sistemas de escucha, remover la basura que dejan los etarras y los dirigentes de la izquierda abertzale, en busca de información, son algunas de las técnicas que usan los espías.

Infiltrados: Toda disidencia, aquí y en la China, siempre ha tenido infiltrados en sus filas, es un mal que hay que detectar y soportar. Nos han llegado noticias de infiltrados en varios partidos políticos independentistas, en la ANC.

Lecciones  contra el espionaje tecnológico, la guerra psicológica y la infiltración

Insurrección de masas de millones de personas en las calles

Una insurrección de masas en las calles: centenares de miles de personas juntas luchando codo con codo de forma tenaz, echarían por tierra la estrategia y la tecnología usada por cualquier estado. Las tácticas de las agencias de inteligencia solo sirve para amargar la vida a algunos dirigentes de partidos y organizaciones políticas, para infiltrar pequeñas bandas armadas,o grupos radicales.

Nadie es prescindible pero tampoco imprescindible

Los lideres son importantes pero no imprescindibles, si un líder se siente muy presionado o es incapaz, el independentismo catalán debe sustituirlo por otro. 

Un movimiento más horizontal y menos vertical

Movimiento más horizontal y convertir el movimiento independentista catalán en un movimiento más horizontal.

Transparencia

En donde hay transparencia, no hay nada que espiar. Es el caso de la ANC, su trayectoria es transparente, el estado español se jactó de que disponía algún infiltrado en la ANC que le informaba de lo se cocía...pero seamos serios, la ANC hace público casi al instante todo lo que dice y hace.

Extremar las precauciones cuando haga falta

Si tienes algo importante que decir a un grupo reducido de personas, puede que hoy sea más seguro, reunirse en un estadio de fútbol, un museo, una cafetería o un sitio concurrido que intercambiar mensajes por Whatsapp. Tengo entendido que algunos espías ya prefieren las reuniones físicas a comunicarse por Internet por esta razón.

No desconfiar en nadie pero tampoco confiar en nadie

Suena contradictorio pero funciona bastante bien. Sabemos que para conseguir metas políticas importantes, hay que actuar en grupo y no en solitario. La desconfianza no puede degenerar en paranoia irracional. Si crees que alguien es sospechoso y te invita a una casa alejada de la mano de Dios o a tomar una comida o bebida que podría estar envenenada, no aceptéis su invitación e inventáos cualquier excusa. A los infiltrados hay que devolverles la pelota: intoxicación, división, desmoralización, etc. Leed este artículo:  El arte de la guerra en el espionaje según Sun Tzu. Un espía está vivo cuando va y viene con información pero un espía está muerto cuando la información que recopila es falsa.

Sacrificio, rapidez y decisión: No nos pueden parar si somos muchos

Gandhi advirtió a sus interlocutores del imperio británico, aunque no recuerdo las palabras textuales, el mensaje era el siguiente: "Ustedes no pueden parar los pies de millones de hindúes si deciden luchar por la independencia"...y así sucedió. Cuántos más personas formen un movimiento político, mayor es el caudal de información a analizar e interpretar, los servicios de información quedan colapsados, el estado se ve obligado a utilizar las tropas parar contener al pueblo, esa acción brutal y desesperada genera represión que da lugar a una reacción que bien canalizada permite lograr la victoria final.

El pueblo si quiere, puede

El dirigente del PP González Pons ilumina el camino a los demócratas catalanes y les recuerda lo que ocurrió en Egipto y eso a pesar de los satélites, el control de Internet, las escuchas, los infiltrados que seguramente también usaba el gobierno egipcio. El pueblo si quiere, puede.

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